Así lo ha determinado mi hermano: "esta ciudad no tiene sentido". Y no le falta razón: cerca de una hora en llegar de un lado al otro, autopistas kilométricas que la cruzan de norte a sur y de este a oeste, atascos eternos, y cientos de vagabundos, ¡qué digo cientos, miles!
En nuestras visitas a Malibú (con piña), Huntington Beach y Newport Beach (ambas en Orange County, siendo la segunda nuestra favorita) nos hemos recorrido la costa de Los Ángeles y demostrado que Marbella y sus alrededores son parecidos, pero que (Edu dixit) "lo nuestro es mejor porque en Málaga tenemos ahí la Sierra de Ronda"...
El paseo por Rodeo Drive y Hollywood Boulevard fue más gratificante en el aspecto de comprador compulsivo, un par de tiendas dieron buena cuenta de ello y realicé mi primera visita a la tienda de Larry Edmund, la mejor en libros de cine del mundo. Fue una lástima no haber conseguido llegar a la estrella del mítico Rodney Dangerfield, pero nos conformamos con la de Sylvester Stallone.
Mañana toca Disneyland...
¡No dejes de escribir tu blog, Andy! Y por favor, mínimo tres referencias cinéfilas por post... ;-)
ResponderEliminarPor lo que veo, de momento todo controlado. Aunque tengo ganas de que se acabe el turismo y entremos en las... ¡luces, cámara, acción!
Un abrazo fuerte:
Alberto.-